El artista que crea una escena musical, busca, a veces, los colores de su inspiración en el visor de sus recuerdos y en el horizonte de su imaginación. |
"Por la música que aman conoceréis la textura de su
alma" (Anónimo)
Y “sólo la música describirá lo más abstracto de nuestros sentimientos y
sólo ella penetrará en los secretos del alma” (Rusty Andecor). Porque,
como decía Aldous Huxley en una de sus citas, “Después del silencio, lo que más se acerca a lo inexpresable es la
música”
"La música, además de su belleza, su estética, su armonía, es
el alimento del ´visor de antigüedades`, desde donde rebobinamos los recuerdos
y visionamos el escenario de nuestra imaginación". (Rusty Andecor)
Quería terminar en esta entrega de mi crónica y "homenaje" a "La música más hermosa del
mundo", nuevamente, con el contenido musical de los dos primeros
volúmenes de la obra, los que llevaban aquel mensaje encubierto y secreto
dentro la música del primero de los temas, y con la insinuación en los
diferentes temas de otras bandas sonoras de cine que incluía. Quedan algunas
otras piezas que completaban estos dos discos, pero me he interesado por las
que más quería destacar, después de aquellas otras a los que me referí en el
último post y en el que tanto me extendí, para significar la intencionalidad
que yo quise darle a aquella música.
Lo más recóndito de nuestra imaginación, lo más abstracto de nuestros sentimientos, sólo lo puede expresar el arte de la música. |
En definitiva, se trata, y esa es mi intención, de sugerir algo
más de ese "mensaje oculto" que a veces emerge de la historia
sumergida en la colección de temas musicales de estos dos álbumes, que además,
y según me dijeron entonces mis amigos, fueron los que más gustaron.
Se trata,
precisamente, de extraer de "la pintura invisible que vemos en
el lienzo de nuestra imaginación", de la música que percibimos en
ella, "con los ojos del
alma", los colores, aromas y formas que, a través de las notas y
acordes que escuchamos, definen el argumento y los matices del guión de ese cuadro musical. Y es que, como decía Eugène Delacroix, “la música es la voluptuosidad de
la imaginación”.
No obstante, me gustaría aclarar, una vez más, que recordando
aquello de "cualquier parecido
con la realidad es pura coincidencia", y si mi descripción pudiera
insinuar alguna vivencia propia o relacionada con mi persona, diría que solo
es una sugerencia a esa historia ficticia que elucubra mi imaginación,
que solo
es la ilusión en un "mensaje oculto" que proyecta la ensoñación y la
fantasía del autor.
El escenario de nuestra imaginación es el mejor motivo inspirador de la pintura musical que creamos, y cuando escuchamos su obra, podemos reproducir todos los colores y matices de nuestra fantasía. |
Así pues, en la crónica musical de este post me referiré a dos
temas del primer volumen, a otros dos del segundo, y continuaré después con la
temática musical de tercer álbum, aquel que titulé, precisamente, "Encuentro en el Sena",
y del que voy a extraer seis títulos de su playlist
y comentar luego su libreto.
"Brothers", de Hans Zimmer, perteneciente a la BSO de "Pearl Harbor", es el primero de los temas que se
incluyen en esta crónica, extraído del primer volumen. De él, hay que decir
que, al igual que en la película en la que la música se mueve entre la gesta y
la proeza de quienes protagonizan el acontecimiento histórico, y que no pierden
en ningún momento la fidelidad del sentimiento de la amistad, en conflicto
alguna vez con el del amor, es asimismo en esta historia, semioculta a lo largo de mi álbum musical y como
una fantasía, la sensación del mismo tono emotivo con el que he querido
exaltar, sobre todo, ese valor más impresionante aún, el de la amistad, pero
sobre el amor. ”Pearl Harbor” es una superproducción
norteamericana de 2001, dirigida por Michael
Bay y protagonizada por Ben Affeck y Kate Beckinsale.
"Unfaithful", un film en que se desatan pasiones y se enfrente la traición y la venganza, aunque a mí, su música me ha servido para buscar un tono más reconciliador. |
En cuanto al tema "Unfaithful" de
la BSO del film del mismo título ("Infiel"), compuesta por Jan A.P. Kaczmarek, se trata de un "Love Theme" basado
en una excelente melodía para piano y cuerda, cuyo esquema musical aparece en
diversos temas del playlist de la película. Su fuerza
dramática, mientras avanza la música nos va describiendo el conflicto
sentimental en el que se enfrentan la pasión y la traición. Y es que
también, en contraste con la lealtad en la ficción de mis invisibles personajes,
es inevitable dejar escapar el mensaje de un sentimiento más vehemente y
descontrolado, que puede provocar la fatalidad y caer en la infidelidad, cuando
esa pasión es más fuerte que la noble amistad. Por ello, y en un alarde
esperanzador de mi trabajo, más feliz que fatal, he preferido finalmente
fijarme en las secuencias más apacibles de la melodía, alejando su significado
más inquietante, para detenerme en la opción que enaltece la fidelidad y
lealtad de la honesta amistad. ”Unfaithful
(Infiel)”, es una producción de 2002 dirigida por Adrian Lyne y protagonizada por Richard Gere y Diane Lane.
Del segundo
volumen, hay que destacar el tema "Mai n Title (I had a
farm in África", perteneciente
a la BSO del film "Out
of Africa" ("Memorias de África"), compuesta por John Barry. Sin duda, la
partitura es una de las melodías más universales del cine y de las que más
definen el concepto musical del "love theme". La
película relata una historia de amor ambientada en un lugar lejano y exótico,
aliñada con el toque refinado y aventurero que caracteriza, respectivamente, a
cada uno de los personajes, pero que se funde en un idilio apasionado y
romántico, que quedó inmortalizado con la interpretación insuperable de Robert Redford y Meryl Streep.
De alguna forma, he querido describir con
la música de "Main Title", de "Out of África", y desde "el
teatro de mi ilusión", esa
misma fuerza arrolladora de sentimientos y de pasiones entre mis personajes
imaginarios. Quizá, también en ese libreto de “mi álbum musical” quise darle un toque exótico, alejado del rigor
de nuestro mundo convencional, entre unos personajes contradictorios, unas
veces extraños, otras veces complicados, pero avenidos también por la aventura
y el romanticismo. ”Memorias de África” es una producción
norteamericana de 1985 dirigida por Sydney
Pollack y que protagonizó tan
legendaria pareja.
Este doble álbum, que luego formaría parte del prólogo de la
colección completa de volúmenes, terminaba entonces con una nota de esperanza.
El tema "Musetta´s Waltz", una melodía en forma de
vals, extraída de la BSO del
film "Hechizo de
luna" y basada en la
música de "La Boheme" de Puccini, es un arreglo del
compositor y pianista Dick Hyman,
que pone un final feliz a una comedia romántica estadounidense titulada ”Moonstruck (Hechizo de luna)”, producida en 1987 por John Patrick y protagonizada por Cher y Nicolas Cage. “Musetta´s Waltz”, casi como la última
página de un cuento, es esa nota feliz que, la ilusión que envuelven los
colores azules del mensaje invisible del doble álbum,
pone broche final a una historia que empieza con ”el adiós en una
calle”. El piano y la cuerda
le dan un tono nostálgico a la música, pero es la esperanza, sobre todo, la que
se deja entrever en el mensaje del tema.
En cuanto a los temas del tercer
volumen, es el momento de
hacer alusión al mensaje musical que describe “Il Mare”, de Rachel Portman, uno de los más emotivos y que
pertenece a la BSO que compuso para
el film "La casa del lago"
(Lake House). Y he recogido aquí el libreto que originariamente escribí en
su día para esta melodía, cuando mi inspiración me había llevado a componer ese
cuento que no llegué a publicar y que pensaba titular “El misterio de la dama del Sena”.
Este era el texto del libreto de aquel tema musical: "Es el poema que enmarca el propio drama de aquel desafortunado
amigo, cuando tras permanecer durante horas en aquel puente del Sena,
meditabundo y ensimismado, con la mirada fija en la quietud y el silencio de
sus aguas, observando su misterio, recordando su compañía, antes, en un paseo
nocturno con su amiga. Hay un instante en que reconoce, no sólo aquella imagen
amada, sino el sonido de su propia voz. Y es entonces cuando ella le susurra:
"He vuelto, mi amigo del alma; porque sé que no te he olvidado y
he comprendido que no podía dejarte.
Quiero que vengas conmigo; ahora sé que nada podrá separarnos. Acércate,
mi amigo; necesito ver tu sonrisa y necesito que me des la mano".
“Es en ese momento cuando nuestro personaje extiende su mano hacia su visión,
quiere acercarse a aquel rostro que le llama y no duda en dejarse llevar por el
impulso hasta arrastrarle al vacío, y es entonces cuando se pierde en la
profundidad de aquellas melancólicas aguas. Así, mientras oímos la música suave
que conjuga el piano y la cuerda, con el clarinete y la flauta, cuando nos da la
impresión de estar viendo cómo nuestro amigo va cayendo lenta, y de forma casi
ralentizada, hasta hundirse en su amado Sena, en busca del sueño que le
reclamaba”. “La casa del lago” es
una producción de 2006, norteamericana, y protagonizada por Keanu Reeves y Sandra Bullock.
Un personaje anónimo, vencido ya por los años, quizá testigo de la desafortunada escena, hace sonar con su violín, las primeras notas de esta triste melodía del film "Lake House". |
"Indecent Proposal-Main Theme", de John Barry,
perteneciente a la BSO del film "Una proposición indecente", otra
de las partituras escogidas de ese “tercer volumen”. Al margen de lo
escabroso de la sinopsis del film, en el que todo gira alrededor de un
peligroso juego en que una mujer (Demi
Moore) acepta un millón de dólares por pasar una noche de sexo con un
millonario desconocido (Robert Redford),
el tema describe, también, en la ficción de mi historia musical, la fatalidad del
destino de ese personaje retratado en el tema anterior y que, hechizado por su
quimérica visión, se pierde en las profundidades de las aguas del Sena. Sin
embargo, la aparición, ahora real e inesperada de la dama, en el mismo lugar en
que un instante antes había permanecido él esperándola, nos hace ver la
adversidad de los acontecimientos. Y es entonces cuando comprendemos que ella
ha llegado demasiado tarde; que él, fascinado por la ilusión de su propia
fantasía, ha buscado, sin quererlo, un encuentro fatídico al adelantarse al
momento real de la llegada de su amada. Y es el momento en que vemos a esa "dama del Sena" sumida en su
llanto más amargo, porque entiende que ha perdido a su amigo para siempre. “Indecent
Proposal” (Una proposición indecente)” es una producción norteamericana
de 1993, dirigida por Adrian Lyne,
con música de Barry y protagonizada
por Redford y Moore.
"Cast Away Theme", de Alan Silvestri, de la BSO de "Náufrago". Otro de los temas de este álbum cuya música
describe ahora cómo vuelve a ensañarse la sucesión del drama, “dibujando” a “la dama” del relato que, después de contemplar el vacío y la
soledad de aquel lugar, siente una brisa estremecedora. De pronto percibe un sobresalto; es entonces cuando se da
cuenta que junto a la orilla hay un cuerpo inerte e inmóvil. Se acerca y
reconoce el rostro de su amado amigo. Sólo hay un consuelo; al menos ha podido
distinguir en su rostro la sonrisa que ella sabía le había dedicado en su
último aliento. “Cast Away” (Náufrago) es un film producido en EE.UU. en 2000,
dirigido por Robert Zemeckis y
protagonizado por Tom Hanks y Helen Hunt.
"La Vie en Rose", de Frederick Hollander, de la BSO de "Sabrina". En este tema, otro de los que se incluyen en
ese “tercer CD”, escuchamos un breve
inicio de las notas melancólicas de un piano, al que sigue la cuerda y la
orquesta. Después se oye un sonido familiar y ya entrañable, muy a lo lejos. El
sonido es, de nuevo, el del acordeón que trata de recuperar la ilusión del
feliz pasado y que, a través de su nostálgica melodía, cada vez se va acercando
más hasta nosotros. Quizá, es la esperanza que, en la bondad de su inmensidad,
puede conseguir hacer realidad aquello de que todo termine siendo… "la vida color de rosa".
Quizá, es el corazón de nuestra amiga del cuento, que tanto había deseado que
su hermoso sueño se hiciera realidad que (como en los mejores cuentos) ha
terminado por vencer a la fatalidad del destino. Tal vez, esos amigos que “la voluptuosidad de mi imaginación”
(como decía Delacroix) fueron creados
por esta música; tal vez, “nuestros
amigos” han tenido la oportunidad de reunirse por fin en ese universo menos
estricto y más benévolo, ese que suele aparecer en los cuentos, pero también
ese que nadie nos lo podrá arrebatar de nuestros sueños. “Sabrina”, la versión clásica
de 1954, un film dirigido por Billy
Wilder y protagonizado por Audrey
Hepburn y Humphrey Bogart.
"Buon
giorno, principessa", de Nicola Piovani, de
la BSO de "La vida es bella". El tema, uno de los últimos de ese
tercer álbum, sirve aquí, en mi homenaje a “la
música más hermosa del mundo”, para reivindicar “la proclamación de la belleza
de la vida y de la aspiración a la felicidad, como principal objetivo del ser
humano”. Es el mensaje aleccionador en el que, después de conocer un
desenlace triste y fatal como el que parece sucederse en esta historia, al final, siempre nace una esperanza: la de
la ilusión, la que existe siempre en todo corazón humano; y siempre nos
mantiene en esa otra esperanza tan maravillosa: la de los sueños, esos que tanto anhelamos poder cumplir. “La
vida es bella”, una producción italiana de 1997 dirigida por Roberto Benigni y protagonizada por él
mismo y Nicoletta Braschi.
"Douce France", interpretado
por André Rieu, es una
vieja chanson de 1943 y cuya música ha servido
de banda sonora para cine en más de una ocasión. Es ya el último tema del “tercer volumen”. Se trata de un vals que describe
el despertar del final del relato, ahora a la realidad, recordándonos que todo, absolutamente todo, ha sido
un cuento. Aunque... dos personajes, desde su lejano universo, lo
festejan.... allá en su ”Café
de París” y dentro de la
magia de sus sueños. … así es como vemos a veces la vida… como un cuento. Lo cierto es
que deseaba, también, poner la nota mágica del mensaje de esa “dulce” música francesa para recordar que la
vida, muchas veces, también puede ser un cuento, un fabuloso o, alguna vez, un
triste cuento.
Soñamos con la ilusión de que nuestro destino, en forma de un hada buena, nos escriba un final feliz de cuento. |
Y el asombro, en ocasiones, aparece en nuestras vidas. El
asombro es un ingrediente imprescindible en los cuentos. Después, suele haber
un desenlace, y los personajes de esa breve trama quedan cautivados y fascinados por su buena
suerte, o atrapados y marcados por su fatalidad. Es el cuento de cada uno, es el cuento de
nuestra vida. Supongo que todos vivimos ese escenario; el azar, quizá el sino nos da nuestro
papel y un guión a seguir, con el tiempo llega el asombro, y cuando cae el telón aparece… ese
afortunado (a veces desafortunado) final del cuento.
Para terminar, me gustaría subrayar aquella frase que escribí una
vez y que ya en otras ocasiones he repetido: “La
música está repleta de lágrimas y sonrisas, de suspiros y de risas”.
Aunque a veces, cuando no queramos dejarnos llevar por la tristeza, le ponemos
un filtro a todo aquello que pueda afligir nuestro estado de ánimo, como esas
gafas de color marrón que tamizan los rayos de sol nocivos para nuestros ojos.
Audrey Hepburno decía: “Si
soy honesta, debo decir que todavía leo cuentos de hadas y son los que más me
gustan”. Tal vez, Audrey temía tanto las
adversidades de la vida y la fatalidad del destino que prefería ignorar esa
parte más real y cruel de la vida, y se refugiaba en sus cuentos. Quizá, al
igual que Holly, el delicioso personaje que interpretaba en “Desayuno
con diamantes”, que prefería llevar sus gafas oscuras para no ver
el desencanto que temía ver sin ellas.
Y quizá, como esas gafas de sol que nos hace ver la vida con otros
colores más apacibles, sólo esa música que penetra dulcemente en el alma
impedirá que la perversidad de un mensaje que nos llega del mundo pueda
confundirnos. Quizá sólo "la música más hermosa del
mundo" hará que comprendamos la fantasía del autor.
Ángel González "Rusty Andecor"
(Nota. El próximo capítulo del álbum literario-musical se publicará en septiembre, a comienzos de otoño).